5.12.07

27.11.07

..vEO....



Veo
moscas
rondando
alrededor
de tubos
fluorescentes
parpadeantes
proyectando
sombras
gigantescas
intermitentes
sobre
cuatro
paredes
apretadas
color
aséptico
y ninguna
puerta




12.11.07

iNSECTOS

Aquella mañana, despues de un agitado sueño, me encontré rodeado de pequeños y espantosos insectos.

Corrían frenéticos por todo mi cuerpo provocando un insoportable cosquilleo al que todavía no me he terminado de acostumbrar.

A la gente le genera curiosidad un tipo que convive con insectos.

Al principio intentaba acabar con ellos, pero al aplastarlos con la palma de la mano el charco que dejaban al reventar me congelaba la piel, y aún así no tenía la sensación de estar reduciéndolos.

Todo el mundo mantiene las distancias. Todo el mundo mira de reojo a un tipo cubierto de bichos.

Con el tiempo descubrí que emergen de una pequeña glándula viscosa y maloliente que nace detrás de mi oreja izquierda, un lugar al que nadie querría asomarse.

Nadie confiaría en un tipo enmarañado de pequeños artrópodos.

Por lo que yo tampoco confío ya en nadie. En nadie que no sean los insectos. A pesar de que son dudosas, tal vez oscuras, sus intenciones como consejeros. Pero saben como nadie usar el arma de la cercanía y la constancia.

Mandan mensajes encriptados dentro de un susurro incesante y caótico de alas que vibran y patas que chirrían. Me sugieren que dude de todo y que no confíe en la gente. Vigilan mi espalda y me advierten que alguien está mirandome. O me dicen: "actúa tranquilo, no hay moros en la costa".

Todo el mundo se siente incómodo al lado de un montón de insectos.

Todo el mundo evita mirarlos y finge extrañarse cuando hablo de ellos.